martes, 26 de marzo de 2013
Una tarde con los amigos,las travesuras con los primos, las historias interminables de los abuelos, una noche mirando las estrellas con mi padre y el arruyo en el vientre de mi madre. Ahora ciertas cosas han desaparecido o muerto. Solo me queda añorar esa vida en donde no existia tristeza alguna. En mis recuerdos nada ha cambiado. Pero yo no estoy allí. MME.
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